El PSOE pide a Jaime Ramos que haga un seguimiento puntual del servicio de autobuses urbanos hasta que se produzca el cambio de empresa

El PSOE ha pedido al alcalde que, de manera urgente, se haga un seguimiento estricto y puntual del funcionamiento del servicio de autobuses urbanos, ante las numerosas quejas de los usuarios, que se están viendo perjudicados en este proceso en el que ya hay nueva adjudicataria, pero sigue trabajando la anterior.

A pesar de que la portavoz del PP, María Rodríguez, afirmó públicamente, en rueda de prensa a finales del pasado mes de diciembre el próximo 1 de febrero comenzaría a trabajar Monbús, la nueva empresa adjudicataria del servicio de transporte urbano en sustitución de Eborabus, lo cierto es que a fecha de hoy ni tan siquiera está firmado el contrato, y se desconoce el momento en que se producirá el traspaso.

Mientras tanto, cientos de ciudadanos se están viendo perjudicados esta situación, que va más allá de simples retrasos,  “e incluso se trata de averías constantes, que no se suplen con coches de reserva, de supresión de líneas y frecuencias que ya son problemáticas en el casco urbano pero que,  por ejemplo en el caso de los coches que van a Gamonal producen un serio perjuicio, por la distancia a que se encuentra la entidad local”., según el portavoz socialista, quien asegura que “tenemos constancia de que en este último caso, en el de Gamonal, se han quedado en tierra muchos viajeros”. Otras líneas, como el Circular, también ha registrado largos tiempos de espera por avería de los vehículos.

DINERO PÚBLICO

Para José Gutiérrez, los talaveranos no tienen por qué sufrir todas estas molestias derivadas de trámites burocráticos, “más cuando el culebrón de los autobuses urbanos lleva coleando casi cinco años, por diversos errores que se han cometido en la tramitación del expediente”. Por otra parte, según el portavoz socialista, “estamos hablando de dinero público. Los autobuses nos cuestan mucho cada mes, y se supone que les seguimos pagando, a pesar de que el servicio no esté al cien por cien ni mucho menos”.

Por este motivo, Gutiérrez considera que desde el Ayuntamiento se debe controlar, tanto a nivel político como técnico, el servicio que se está prestando, y obligar a la empresa a que haga adecuadamente, además de acelerar todos los trámites para que, de una vez, se acabe con esta historia, “porque son los ciudadanos los que pagan las consecuencias, con sus impuestos y aguantando las molestias”.