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El Soliss FS Talavera sobrevive a un mal día para sumar tres nuevos puntos

Los talaveranos consiguieron arreglar en el tramo final un encuentro ante ADAE Simancas que se les puso tremendamente mal y donde llegaron incluso a ir por debajo en el marcador (1-5).





Salió vivo el Soliss Fútbol Sala Talavera del Pabellón Municipal de San Blas en una cita en la que los cerámicos eran conscientes de la dificultad del rival, ADAE Simancas, pese a que éste se encontraba en los puestos bajos de la general. Aquí otros rivales directos sufrieron mucho y otros incluso se dejaron puntos, por lo que los pupilos de Raúl Aceña ya estaban avisados de antemano de lo que les podía ocurrir si no daban su mejor versión.

La verdad es que esa mejor versión tardó mucho en aparecer y el que piense que el 1-5 fue un resultado cómodo, la verdad es que poco vio de la cita, una cita en la que los visitantes llegaron a ir a remolque en el marcador después de un arranque de partido en el que les mataron las imprecisiones y también la precipitación a la hora de definir. Unas veces por defecto y otras por exceso los celestes se atragantaban y su rival lo tenía sin duda mucho más claro.

De una presión en tres cuartos de cancha contraria para ahogar la salida de balón los de Emi García permutaban con una defensa en quince metros para replegarse y salir con veneno a la contra. No habría muchas llegadas en este primer periodo, pero de las pocas que hubo fueron más claras las de los naranjas, que perdonaban con Pedro y ejecutaban con un remate de Rober que desviaba hacia su meta Jesús Jiménez para el 1-0.

Ese primer tanto del partido llegaría cuando los visitantes estaban empezando a entrar en el partido e incluso habiendo dispuesto de un remate de Rober que repelía la madera y que bien pudo cambiar el rumbo de la historia. En los últimos cinco minutos parecieron invertirse las tornas, siendo Simancas el que dominaba y curiosamente lo que llegaría sería el tanto cerámico.

Con tan sólo once segundos por disputarse Anass se vestiría de asistente y servía a Jesús Jiménez para que éste enmendase su error en el 1-0 e hiciera el 1-1 después de ejecutar dentro del área ante un Pablo que poco pudo hacer por evitar el tanto de un empate con el que nos íbamos al tiempo de descanso.

En la reanudación salió el Soliss FS Talavera más convencido de la forma en cual hacer daño a ADAE Simancas, incluso protagonizaría un buen arranque en el que llegó a rondar el tanto con Josete como protagonista. Lo que pasa es que para ello había que tomar algún que otro riesgo y eso convirtió a Rafa Luque en salvador de su equipo con varias intervenciones de mérito, como la que sacó por dos veces ante Tito y posteriormente ante Rober.

El crono comenzaba a ir cada vez más veloz, a la par que los visitantes seguían teniendo problemas de finalización, así como de faltas, pues en apenas siete minutos se plantaban en cuatro faltas siendo un par de ellas bastante discutidas. El partido cada vez se ponía más feo para los intereses talaveranos y tres errores defensivos y por suerte solucionados obligaron al cuerpo técnico a solicitar el tiempo muerto con más de medio tiempo por jugarse.

Mano de santo sería esta solución. Jesús Jiménez comenzaría a tomar el mando de las operaciones en ataque, pero no sería él quien ejecutase el tanto para desnivelar el marcador. Y es que sería Malaka, experto en estas últimas semanas en desatascar partidos, quien aparecería al segundo palo para remachar un balón de Josete enviado al corazón del área.

El 1-2 subía al marcador, insuflaba aire para los de Talavera de la Reina y dejaba tocado a un rival que se encontró un par de minutos después con otro golpe. Dentro del área la tenía Justo Cáceres y se la ponía a Jesús Jiménez, que optaba por la colocación para superar a Pablo y hacer un 1-3 que sabía a gloria después de todo lo pasado hasta entonces.

Tras este tanto de cinco se la jugaron los madrileños con Isi en dicho rol. Buen trabajo de los talaveranos en la defensa en inferioridad, si bien es cierto que Adri pudo conseguir el 2-3 pero se encontraría con la madera. También antes pudieron Panucci y Justo Cáceres ampliar renta, pero el partido todavía les tenía reservados dos momentos estelares.

Con el crono agonizando el ala salía a la carrera, se zafaba de su par y a portería vacía ponía el 1-4. A escasos segundos para el final y desde prácticamente su área el capitán ponía la sentencia definitiva y cerraba el marcador con un 1-5 que quizá resulta excesivo visto lo visto, pero esto es lo que a veces tiene este deporte… 

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